Estamos situados ante uno de los edificios con más historia de Talavera, la peculiaridad de este edificio, hoy Biblioteca Niveiro – Alfar El Carmen, es que en otro tiempo fue además Convento de los Carmelitas Descalzos de El Carmen y posteriormente Fábrica de Cerámicas.  El edificio se encuentra situado en lo que fue el tercer recinto amurallado de la ciudad.

El origen del edificio se remonta al año 1690, cuando el monje talaverano Melchor de San Antonio junto con otro religioso llegó a Talavera con el ánimo de fundar una comunidad de su orden de Carmelitas Descalzos. Para ello tuvo que vencer muchas adversidades pero la influencia, tanto de la familia de los Meneses como del cardenal Portocarrero, provocó que el convento llegara a ser una realidad y el templo fuera construido con los restos de la parroquia de San Esteban y de la muralla de la zona de San Clemente.

Las obras del templo comenzaron en 1704, y no fue hasta 1711 cuando se consagró como iglesia de estilo barroco.

La invasión francesa y la desamortización, provocaron graves daños en el convento hasta acabar con él. De este modo, en 1848 el antiguo templo pasa a ser fábrica de tinajas y un año después, en 1849, es adquirido por Juan Niveiro, que instala allí una fábrica de cerámica, llamada El Carmen.

Hoy día, es el único alfar de la época en Talavera de la Reina, un claro ejemplo de arqueología industrial.